Tras la publicación de su EP Theorein en 2018, Sara Azurza nos presenta su primer disco de larga duración. Hemos estado charlando con ella sobre las canciones de su nuevo trabajo Hemen berriro, sobre su proceso creativo y sobre cómo fue el concierto de presentación ofrecido en Donostia (su ciudad natal), entre otras cuestiones.
Eras muy joven cuando subiste al escenario por primera vez. Desde entonces has realizado muchas colaboraciones, has publicado un EP y has participado en el concurso de maquetas de Gaztea, entre otros. ¿Cómo has vivido todas estas experiencias?
¡Bien! Al fin y al cabo, ese recorrido realizado desde mis inicios constituye una parte importante de mi vida, y todavía no ha hecho más que empezar. He aprendido mucho, y me queda todavía mucho que aprender de estas experiencias. En realidad, es algo que llevo dentro desde mi niñez; siempre he sido quien animaba los cumpleaños con mis canciones y coreografías. ¡Mis padres siempre me han dicho que nunca se han aburrido conmigo! Supongo que por eso empecé tan joven, y también por la influencia de personas que he ido conociendo en mi camino.
(Autora de la foto: Cecilia Álvarez-Hevia)
En 2018 publicaste Theorein, tu primer EP. En una época en la que tienen cada vez más peso los singles, los temas sueltos, ¿qué te ha llevado a publicar tu primer disco de larga duración? ¿Por qué ahora?
Los singles o canciones sueltas tienen mucha presencia hoy en día, pero tenía ganas de hacer un trabajo largo. Al principio no era consciente, pero a medida que iba componiendo temas sueltos sentí que quería hacer un disco completo. En mi opinión, las canciones sueltas están bien para momentos concretos, pero en los discos se entiende lo que está detrás del artista; lo que este quiere transmitir. ¿Por qué ahora? Porque ahora era el momento más adecuado para mí, tanto desde el punto de vista musical como desde el punto de vista de los recursos.
¿Qué nos cuenta Hemen berriro? ¿Cuál es el hilo que une las canciones?
Hemen berriro es un reflejo de los ciclos emocionales de la vida. Escuchando la letra y la música, encontraremos las diferentes fases emocionales por las que puede pasar una persona. Todas las canciones cantan a algo, a una emoción. Sin embargo, aunque para mí tienen un significado concreto, para los demás tendrán otro, y eso es lo más bonito, que cada cual haga diferentes reflexiones sobre las emociones en cada canción.
¿Cómo ha sido el proceso de creación del disco? ¿Quién te ha acompañado? ¿Contarás con el mismo grupo en las actuaciones en directo?
El proceso ha sido muy bonito, he aprendido mucho. Además, he tenido la fortuna de que unos músicos fantásticos se hayan implicado en mi proyecto. En este proceso tengo que mencionar a Eñaut Gaztañaga, Iker Lauroba, Haritz Lauroba, Julen Barandiaran, Andoni Etxebeste y Gartxot. En los directos cuento con Iker, Haritz y Txiki (Julen) (sois los mejores < 3).
(Autora de la foto: Cecilia Álvarez-Hevia)
En cuanto al estilo, ¿cómo son las canciones que has incluido en el disco? ¿En estos tiempos, tiene sentido seguir empeñados en poner etiquetas?
Diría que es un disco de estilo diverso, no se centra solo en uno. En la base de todos está el soul, o música negra, a menudo mezclada con pop. Pero cada canción tiene su carácter y convive con las demás. Las etiquetas son etiquetas y no les hago demasiado caso.
En este trabajo la diversidad no es solo de estilos, sino también de lenguas. ¿Las propias canciones demandan un determinado idioma?, ¿es algo que ocurre de forma natural?, o ¿es un camino para el juego y la exploración?
Es un espacio para el juego, sin duda. Siempre me ha gustado aprender idiomas y jugar con ellos. Sin embargo, estoy apostando por el euskera. Antes, la mayoría de las canciones salían en inglés, por influjo del estilo de música que escucho. Hoy en día uso cada vez más el euskera a la hora de hacer canciones.
(Autora de la foto: Cecilia Álvarez-Hevia)
El 10 de febrero, diste tu concierto de presentación en Donostia, en la Sala Imanol Larzabal de Lugaritz; en tu ciudad natal, tu barrio. ¿Cómo fue la experiencia? ¿Estás ya preparando tus próximas actuaciones?
Fue una experiencia muy bonita, emotiva. La sala se llenó hasta arriba, ¡y no lo esperaba! Mi padre me dijo orgulloso: «¡Sara, he oído que también ha venido gente que no es de Donostia!». Eso es una buena señal. Estoy disfrutando cada vez más del escenario, y espero seguir así. Las siguientes actuaciones vendrán a partir de la primavera, ¡vamos a seguir trabajando, por supuesto!
Izaro, Idoia, Olatz Salvador, Esti Markez, Sara Azurza... Afortunadamente, sois cada vez más las mujeres que os hacéis un lugar en el mundo de la música. El presente y el futuro de la música vasca están en buenas manos. ¿Cómo valoras el hecho de formar parte de ese grupo?
Es cierto que en los últimos años hemos empezado a subir al escenario con nuestros proyectos cada vez más mujeres solistas, y formar parte de ese grupo me hace muy feliz, porque admiro mucho a esas mujeres y compañeras, así como a todas las mujeres que trabajan en solitario. La profesionalización de las mujeres del mundo de la música era necesaria, y me siento orgullosa de que se alcance este nivel de visibilización. Sin embargo, todavía queda mucho trabajo por hacer.
(Especial publicado el 9 de marzo de 2023)