Una obra de teatro accesible para personas con limitación sensorial.
Edad recomendada: A partir de 14 años
A los 19 meses, Helen Keller perdió la vista y el oído por una enfermedad. Aun así, en 1904 se convirtió en la primera persona sorda y ciega que obtuvo un título. Sin embargo, toda su vida debió luchar menos contra sus discapacidades que contra una sociedad diseñada para ‘videntes’ y ‘oyentes’. La laureada compañía gallega (Premio Nacional de Teatro 2014) nos invita a cuestionar los estereotipos, a reflexionar sobre lo que significa ser una ‘maravilla’ y a descubrir el poder de la resistencia, con humor, emoción y un enfoque contemporáneo.
Ficha artística: