Partiendo tanto de imágenes de archivo como de generadas en el momento, es una película que se construye directamente.
Izanik activa el diálogo entre las imágenes recuperadas del patrimonio audiovisual y las procedentes de la cultura visual actual.
Propone una reflexión sobre el registro de nuestros recuerdos, sobre cómo se teje la memoria individual y biográfica con la piel colectiva.